Si te viste reflejado en varias de las cosas expuestas en el artículo anterior, posiblemente sufras de dependencia emocional. En ese caso me gustaría comentarte algunas cosas para puedas tener en cuenta.
Es bueno que hagas una lista de cosas que haces por el otro, y que sentís que en cierta manera te perjudican. Es bueno que seas consciente que una persona dependiente deja de lado su propia felicidad para vivir la del otro. Prefiere hacer feliz al otro para no perderlo.
Podés preguntare a vos mismo: ¿Qué cosas tiene la otra persona que te perjudican?, ¿Te tratan con el respeto que te merecés?, ¿Qué hacés por el otro que a vos te perjudica?, ¿Dejaste de lado amistades, familia, actividades, estudios, desarrollo personal?, ¿Hiciste cosas que no están bien para no perder al otro?, ¿Cómo están tus emociones?
Además de esta persona ¿Hay otras áreas o roles en tu vida en las cuales puedas disfrutar? ¿Aguantás muchas cosas negativas con tal de no perder a esa persona?
Es muy importante que seas consciente del sufrimiento que vivís por ser una persona dependiente. Muchas veces esta dependencia, al ser parte de tu persona, pasa desapercibida y vos no pensás realmente en lo mal que la estás pasando. Pensá en todo lo negativo que te trajo esa relación, de esta manera vas a reforzar tus ganas de cambiar y de eliminar la dependencia emocional de tu vida.
Un factor importante en cualquier tipo de dependencia es el autoestima. Una baja autoestima hace posible este tipo de situaciones. Podés trabajar en tu autoestima, si es necesario con un profesional de la psicología. Reforzar tu autoestima es importante para tu bienestar emocional.
Por otro lado nunca vas a aprender a estar con otro, si en primer lugar no aprendés a estar con vos mismo. Los problemas de aceptación de los demás surgen, muchas veces, porque vos mismo no te estás autoaceptando. Aprende a pasar tiempo a solas con vos mismo. No es sano querer constantemente tener una pareja o un compañero y no saber estar a solas.
Es muy lindo tener alguien con quien compartir, pero eso no va a pasar si no aprendés a compartir con vos mismo. No es lo mismo querer tener alguien con quien acompañarse mutuamente, que “necesitar” a alguien. Si necesitás a otro, algo está fallando en el amor a vos mismo, por lo que no va a ser fácil amar a otro de una manera madura y sana. Lo sano es aprender a disfrutar una vida sin pareja, desarrollar otros áreas y roles, hacer amistades, relacionarse con diferentes personas en distintos ámbitos. Aprender a amarte y cuidarte como te merecés.